POSVERDAD O MENTIRAS

No puedo dejar de sorprenderme la hipocresía de los seres humanos de los que formo parte, por lo que no dejo de pensar, que si todas las personas estamos formadas de la misma materia, todas tendremos algo de hipócritas aunque no lo sepamos.

Lo que es cierto es que unas personas  son mas hipócritas que otras.

Y otras son sorprendentemente rastreras y alimañas.

Hemos acuñado la definición de posverdad , un termino que se incluyó en el diccionario de la lengua española a finales del 2017.

 Este termino, se le atribuye a mucha gente, nosotros se lo atribuimos a un bloguero, que hablaba de los políticos diciendo que la verdad no cuenta, o cuenta muy poco y empleó ese termino para referirse a lo que las fuerzas políticas creaban  en la opinión publica, una verdad que no lo es.

Es una herramienta utilizada por los políticos o por otras personas para manipular la opinión publica.

Posverdad: 

Distorsión deliberada de una realidad, que manipula creencias y emociones con el fin de influir en la opinión pública y en actitudes sociales. 

 Y nos hemos quedado tan anchos, sabiendo que los medios de comunicación principalmente, distorsionan la realidad para ponernos a favor o en contra de lo que les interesa, lo peor de todo es que generalmente lo hacen por motivos económicos, como los grandes reality, que vemos a menudo, siendo el mas famoso e hiriente,  Sálvame de luxe, que tiene una audiencia increíble, con unas individuas e individuos, que no saben que hacer con su vida, a no ser ofender, criticar y mancillar a otras personas….y que todas sabemos que de periodistas tienen poco.

 

También lo hacen las personas que hacen política, en vez de estar a nuestro servicio y decirnos las cosas como son, se empeñan en destruir a la competencia con mentiras, y nunca sabemos donde posicionarnos, porque no sabemos cual es la verdad de la que cuentan.

Si hablamos de periódicos, sabemos que están comprados, cada periódico defiende los ideales de su director. “Dime que director eres y te diré a que partido político defiendes”. Sin importar la verdad.

Distorsionar la realidad a sabiendas, hacer daño a sabiendas,  con conocimiento de causa y solo por el placer de tener audiencia ó enriquecerte o hacer que odien a alguien porque te cae mal, o no tiene tus pensamientos…ya tiene un nombre, que es el de mala persona, egoísta, avaricioso, y un montón de palabras que los define.

 A mi me enfada especialmente, porque pienso en muchas personas con una mente sencilla, que creen que lo que dice la televisión o el periódico es totalmente verídico.

Yo creo que esto debería de ser delito. No es suficiente con que les demanden y luego salga que no tienen razón. En el corazón y en el inconsciente de la gente queda la noticia que dieron a bombo y platillo, no queda lo que después dijo un juez, eso se olvida y eso lo saben los grandes mentirosos de la tele.

¿Qué podemos hacer las personas que no estamos metidas en esta porquería? ¿Cómo cribamos la información de cualquier cosa? ¿Cómo nos libramos de esta lacra? Hay cosas que son fáciles de hacer, como no ver ciertos programas de televisión pero hay otras que son complicadas.

 

Nuestra intuición puede servir para algunas cosas, según nuestra inocencia o nuestra simplicidad de mente, o incluso nuestra edad.

Hace años cuando la lavadora era un lujo, anunciaban que un detergente lavaba la ropa sola sin frotar, conocí a un joven que  hizo la prueba, puso la ropa en una bañera echó el detergente y se sentó  a esperar…. Y se hizo adulto.

Eso le sirvió para saber que no se puede uno fiar de los anuncios, pero después de la infancia, sabemos que los anuncios son eso.

Ahora sucede algo parecido, pero  es directamente para engañar o falsear la realidad.

No podemos obviar que una de las fuerzas políticas que nos tienen muy acostumbradas a todas las personas a estas mentiras pensadas, es el partido político que nos gobierna.

Tenemos varios ejemplos claros de estas situaciones:

En política todo está permitido, cuando una agrupación política te cae mal no hay mejor cosa que desprestigiar, es mas importante desprestigiar que decir que llevar tu programa electoral de las cosas que quieres cambiar  y mejorar, eso queda en segundo lugar…o en ultimo.

Se ha dicho que  Ciudadanos “recupera la mili”

Se ha dicho que Podemos  exige el fin de semana santa porque ofende a nuestros hermanos musulmanes ó  que quiere crear playas para musulmanas.

Se ha dicho que el PP sube la edad de hacer sexo a los 21 años.

Incluso hay montajes de fotos, , es probable que muchos las recordemos, pero poco sabemos que no era cierto.

Las mentiras repetidas terminan teniendo la fuerza de una verdad, extenúa nuestro sentido critico.

Cuando sucedió lo del Prestige en Galicia,  Aznar manipuló la información para quitarle importancia, a lo que fue la peor catástrofe medioambiental de la historia reciente de España, donde murieron 100.000 aves, y desaparecieron otros muchos recursos marinos.

Aun siendo visible el  fuel por la costa Gallega, seguían insistiendo en que “no era para tanto”, decía Trillo, que las playas estaban esplendorosas….con ese “esplendor” muchos voluntarios, sin mascarilla ni guantes estuvieron colaborando a limpiarlas sin saber muy bien como hacerlo, y las consecuencias que podía tener para su salud,  por la falta total de información ….que tenían.

 

Con la guerra de Irak,  nos “vendieron”  con seguridad plena unas armas masivas que después de asesinar a  mas de medio millón de personas, se cerró con un “lo siento, estaba equivocado”.

 Rajoy nos contó hace pocos años que “España es hoy una economía más competitiva, que está creciendo y creando empleo por encima de las mejores previsiones porque produce, exporta y, en consecuencia, consume sin endeudarse con el exterior".

La economía española es precaria, por lo que no puede ser competitiva.

La evolución del PIB y cifras del paro, no reflejan la realidad de nuestro país.

Desde que Rajoy gobierna, no existe una creación de empleo real, mas bien, unos empleos precarios, que nos han acostumbrado a vivir en la incertidumbre y hemos pasado de ser”mileuristas” a cobrar menos, y encima estar contentos de estar en el paro.

Se habló de que la reforma laboral del 2012 se realizó para crear mas empleo, cuando vemos que el problema de la Seguridad social está en que los nuevos empleos cotizan poco y aportan poco a la caja común.

Los periodistas y tertulianos de los miles de realitys existentes en nuestro país, han adoptado esta postura de posverdad, que logra confundirnos.

 Al Bano y Romina , tuvieron la desgracia de perder a su hija hace muchos años, y no tuvimos ningún pudor, en llevarle a un programa televisivo para asegurarle que su hija estaba viva, sin tener ni una prueba de ello…y sin valorar el daño que le causamos a esa familia, este hecho tan grave, de Lydia Lozano, la ha perseguido “un tiempo”, pero no por eso hemos dejado de ver los programas donde ella está ni hemos dejado de creer lo que dice, la cercanía, de los tertulianos, su forma de hablar y su seguridad en las mentiras que cuentan, hace que volvamos  a confiar.

 

Desmentir una mentira, se hace “por la puerta pequeña”, sin muchos espavientos, por lo que queda en la memoria del lector o televidente la mentira por encima de la verdad.

Eduardo Inda, acumula muchos delitos de falsedad y calumnias, es probable que todos recordemos muchas cosas de las que ha dicho ,pero pocos sepamos cuales son mentira.

Este “supuesto periodista”,  es famoso por destrozar  las carreras de muchas personas con posverdades.

Y por desgracia es director de un periódico.

¿Por qué lo hacen?

Fácil, porque  es una mina de oro, todos estos personajillos ( palabras muy utilizada por Jiménez los Santos) han descubierto que se gana mas dinero contando cosas inventadas de otras personas que haciendo un periodismo  veraz, leal y autentico.

A veces nuestra memoria nos juega malas pasadas, y decimos cosas que creemos o que hemos hecho, las tenemos como ciertas de nuestros recuerdos  de juventud, nuestros sentimientos de algo que ocurrió, que quizás no sea de esa forma, pero esto no es lo mismo que desvirtuar la verdad a sabiendas, con el único propósito de engañar o tener mas audiencia.

La sociedad debería plantearse cambiar de canal, o dejar de leer a ciertas personas que se llaman periodistas, pero que aunque tengan un titulo, no lo son y hace un flaco favor a los verdaderos periodistas, que hacen un seguimiento exhaustivo de la noticia que reciben y que son incapaces de trangiversar la verdad a propósito para obtener un beneficio propio.

Y sin lugar a dudas, si tuviésemos unos políticos y una justicia integra, estas mentiras tendrían que salir tan caras, como perder el poder mediático, y no dejarles ejercer este oficio ( tertuliano,  presentador, periodista de tres al cuarto, etc.) a todas aquellas personas que se dedican a decir posverdades de otros.

No me cabe la menor duda, que si ellos cayesen en desgracia, otros muchos aprovecharían la oportunidad de crucificarles, es decir, de probar su propia medicina.

Nos harían a todos un gran favor si los pudieran desterrar  unos 15 años, a  hacer pozos de agua a  Hucula, (Mozambique) o a cualquier otra ciudad de África.

Al menos tendrían  la posibilidad de compensar tanto daño.

 

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